nosotras...y LA PELUQUERÍA!!

Hola, ¿¡qué tal!? (¿Alguien se acuerda de cómo continuaba esta frase según la canción de El Semáforo? ¡Qué tiempos!)

Tengo que confesaros algo: no voy a la peluquería desde Junio. La explicación, es que llevaba una época en la que cada vez que iba, salía queriendo matar al pobre trabajador que me había tocado en cuestión. Sé que seguramente la culpa no fuera suya, pero tal vez las que llevéis flequillo me comprendáis! ¡Lo quiero per-fec-to!
Así que al final decidí que, total, para cortarme un poquito este complejo amigo, no sería necesario que fuese a la pelu cada mes... (¡cómo crece el condenado!).
Para terminar de decidirme, ahí estaban en un cajón las tijeras profesionales que se compró mi padre para recortarse la barba, que, por cierto, usó...¡una vez! (venadas paternas...sí, ellos también se preocupan por su físico más de lo que pensamos...)
Con el tiempo, me fui volviendo más atrevida y probé a cortarme también las puntas. Ahora, he decidido que voy a estar un año entero sin ir a una peluquería. Sé que es algo absurdo, pero quiero llevar a cabo mi plan con éxito. Cabezonerías que tiene una.

Os cuento todo esto, porque creo que en las fotos que os voy a enseñar, me ha parecido apreciar algún trasquiloncillo...¿lo habéis encontrado?
Dejando esto al margen, os comento que el outfit es sencillo y tiene como protagonista una camisa de hace unos dos años de H&M, que tenía algo olvidada. En breves (después de Diana, que ya estaréis hartos de mí), os mostraré un look con mis nuevas prendas de Pepa Loves, que me llegaron ayer en un pedido de Privalia, son preciosas!

Camisa y gorrito: H&M
Jeggings, botines y cárdigan: ZARA
Bolso: MISAKO

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